viernes, 8 de febrero de 2008

Somos un potencial, no una carga

"Pero mantener en nómina 5% de personas limitadas es una exageración, porque podría ser un freno en la productividad de una compañía pequeña, que por ejemplo tenga tan sólo 20 empleados". Nelson Puchi, presidente de la Asociación de Industriales de Miranda

Venezuela es un país que recién despierta a una realidad que le era desconocida. El tema de la discapacidad permanecía subyacente y la discriminación total enterraba en vida a aquellos que tenían diferencias funcionales condenandolos a un mundo frío y sin esperanzas. Estas personas han visto en las actuales políticas la oportunidad de resucitar y ser valorados dignamente.

Felicitamos la noticia en la cual un grupo se ha interesado por formar laboralmente a personas con discapacidad, las que por Ley tienen derecho al acceso al trabajo. Aunque no sabemos cuantas personas con esta condición tenemos en nuestro país, los estándares internacionales apuntan que en Venezuela el índice debe rondar entre el 10 y 17 por ciento de la población. Un cinco por ciento garantizará empleo a una fracción por lo que queremos manifestar nuestro desacuerdo referente a las declaraciones del señor Nelson Puchi en dicha noticia publicada por El Universal el día Lunes 04 de febrero del presente año.

La razón de empleo de las personas con dis-capacidad no surge por su in-capacidad para realizar trabajo productivo sino porque son muy CAPACES de cumplir con eficiencia toda labor emprendida. La protección estipulada en la Ley a este grupo humano se debe a la discriminación y no a sus deficiencias.

Hemos visto pequeñas empresas que tienen a varias personas con discapacidad y, sorprendidos, hemos visto que no representan carga alguna. Todo lo contrario, es una constante, con sus excepciones, que la gran mayoría de los dis-capacitados se desempeñan, no sólo igual sino mejor que los autovalentres.

También hemos visto a grandes empresas cuyo empleado con discapacidad es el buen ejemplo para sus compañeros.

La inclusión laboral no es una carga a ninguna empresa.

Los minusválidos que malamente han sido excluidos sí son una grave carga social que debe revertirse con el cambio de conciencia de todos.

Reclamamos, inclusión laboral porque las personas con discapacidad somos un potencial cuya contribución enriquecerá a la nación y nos dignificará tanto a nosotros mismos como a nuestras familias y a la sociedad en general.

Las personas con discapacidad somos un potencial apenas descubierto que debemos ser vistas como un recurso invaluable. Asunto que debe ser comprendido tanto por autovalentes como por disvalentes.

Noticia comentada:
www.eluniversal.com/04/02/2008

Italo Violo