Las personas con discapacidad o diversidad
funcional llevamos una lucha por lograr nuestra inclusión. Dentro de las
acciones, quizás la principal, ha estado la de buscar la forma de que quienes
no tienen discapacidad puedan comprendernos y nos faciliten los medios que
permitan nuestra inclusión.
Sin embargo, después de ciertas observaciones,
hemos concluido que el enfoque para lograr la inclusión debe centrarse en el
fuero interno de la persona con discapacidad o diversidad funcional. En nuestro
país, hemos venido trabajando fuertemente para que la sociedad venezolana nos
vea con buenos ojos pero es más necesario aún que veamos con mejores ojos al
mundo. Se hace necesario cambiar al individuo con discapacidad haciéndole ver
al menos 4 aspectos:
Primero: Que es tan valioso como cualquier
otra persona.
Segundo: Que tiene derechos y deberes.
Tercero: Que debe hacer uso de esos derechos.
Cuarto: Que debe participar activamente en su
restauración.
No basta que la Ley
ofrezca protección y beneficios, ni que se den ciertas donaciones sino que es
preciso que las propias personas con discapacidad salgamos de nuestra concha
para trabajar a favor de nuestros derechos. Esta conclusión tiene sus razones.
Unos pocos nos hemos esforzado por ganar espacios tocando puertas dispuestas a
abrirse, pero necesitamos a un número mayor de personas con discapacidad dispuestas
a tocarlas.
La intención que
nos mueve es que las personas con discapacidad o diversidad funcional, con un
cambio de actitud y mejora de la autoestima, tomemos las riendas de nuestro
propio destino para que podamos lograr plena inclusión y el mayor grado de
independencia que nuestras capacidades nos permitan.
Estas palabras tienen la intención de concientizar
a todos los que padecemos una discapacidad para que comprendamos que el factor
principal está en nuestras manos y para que nos animemos a organizarnos y a
apegarnos a las agrupaciones que intentan mejorar nuestro nivel de vida. Se
hace necesario que trabajemos en común para que por la ley de la sinergia
hagamos más fácil la vida de quienes vienen atrás. Porque las barreras solo
caerán si nosotros las derribamos y solo
habrá inclusión cuando nuestra activa participación lo haga posible.
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